Libro de los Medicamentos Simples

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La celidonia es una planta muy común que llamamos así. Algunos la llaman esclaire. Es caliente y seca en cuarto grado. Hay dos clases de celidonia, a saber. Una es la de la India, que tiene la raíz cetrina y tiene una gran virtud. La otra es la común que crece en este país, que tiene menos virtud. No obstante muchas veces se pone una planta por otra. Según dice Constantino, cuando en una receta encontramos indicado simplemente celidonia, se ha de utilizar únicamente la raíz, no la planta. Su raíz se puede conservar durante tres años. Tanto por sus cualidades como por su substancia tiene virtud de atraer, de consumir, de deshacer y de separar los humores. Contra el dolor de dientes causado por frialdad, se debe machacar un poco la raíz, y después dársela al paciente para que la tenga entre el diente dolorido y el opuesto. Para purgar la cabeza y la campanilla repletas de humores fríos, se deben picar muy bien las raíces de celidonia, después cocerlas en vino, y hacer respirar al paciente el vapor del vino. Después hacer un gargarismo con el vino donde se ha cocido esta planta, porque de este modo se seca la campanilla y se purga la cabeza. Contra la pasión cólica se debe picar la planta y después cocerla en vino. Se aplica sobre la parte dolorida en una esponja empapada de este vino y de polvo de la raíz. Para provocar el flujo menstrual retenido y para limpiar la matriz se debe hacer con frecuencia una fomentación o calentamiento de las partes de abajo con el agua donde se haya cocido esta planta. Para los chancros de la boca o de otras partes externas, o para la corrosión de una llaga que crece todos los días, se deben mezclar bien polvo de la raíz de celidonia con polvo de rosas en vino agrio. Después se deben cocer hasta que espesen medianamente, y adquieran la consistencia de la mostaza. De esta preparación se untan los lugares donde está el chancro o la corrosión. Es un remedio muy útil. Contra la fístula, se debe preparar el polvo de celidonia con capitellum. El capitellum es una lejía muy fuerte hecha de varias clases de cenizas por los curtidores, es tan fría que hay que añadirle un huevo crudo y cocerla un poco. De este modo, se mezcla el polvo de celidonia con este capitellum, y se aplica con la ayuda de un tubo en el agujero de la fístula. Contra la oscuridad en los ojos, o la oftalmia, o también la roña, hacer un colirio de jugo de celidonia con miel, vino y pimienta blanca. Es un remedio que ha sido probado por muchos. Hay otros que ponen sobre los ojos lo que sale de la raíz cuando se rompe, que es un remedio muy útil. Para estas mismas enfermedades sirve el jugo de las hojas y de las flores de celidonia con miel fina mezclados, y luego se ponen en una vasija de bronce dentro de las cenizas calientes y se cuecen hasta la perfección, luego se guardan y se puede utilizar cuando haga falta. Este singular remedio sana la oscuridad de los ojos.
Strigium es la hierba mora, se le llama también solatrum. Es fría y seca en segundo grado, y en cierto modo es desopilante de los conductos de la orina del cuerpo, por lo que es diurética. Mientras está verde tiene una gran virtud, tanto en sus hojas como en su fruto, pero cuando se seca no tiene ninguna virtud. Contra la opilación del hígado y del bazo y, especialmente, contra la ictericia que se produce porque en los conductos del hígado con bilis están opilados, se debe dar a beber su jugo, o bien hacer con este jugo y azúcar un sirope. Aún mejor es dar dos onzas de su jugo con cinco dracmas de ruibarbo. Contra los apostemas que hay en el estómago, en el hígado o en los intestinos se debe dar jugo de hierba mora con una tisana. Dioscórides alaba mucho este remedio. Contra el calentamiento del hígado se debe doblar muchas veces un trapo, empaparlo de este jugo y aplicarlo sobre el hígado. Este mismo trapo, así doblado y mojado en este jugo se puede poner encima de la podagra. Todavía es mejor si al jugo se le añade aceite rosado, vino agrio o agraz, se moja con esto el trapo y se aplica encima. Contra los apostemas calientes cuando son recientes para consumir la materia se debe poner encima la planta de la hierba mora picada.


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La celidonia es una planta muy común que llamamos así. Algunos la llaman esclaire. Es caliente y seca en cuarto grado. Hay dos clases de celidonia, a saber. Una es la de la India, que tiene la raíz cetrina y tiene una gran virtud. La otra es la común que crece en este país, que tiene menos virtud. No obstante muchas veces se pone una planta por otra. Según dice Constantino, cuando en una receta encontramos indicado simplemente celidonia, se ha de utilizar únicamente la raíz, no la planta. Su raíz se puede conservar durante tres años. Tanto por sus cualidades como por su substancia tiene virtud de atraer, de consumir, de deshacer y de separar los humores. Contra el dolor de dientes causado por frialdad, se debe machacar un poco la raíz, y después dársela al paciente para que la tenga entre el diente dolorido y el opuesto. Para purgar la cabeza y la campanilla repletas de humores fríos, se deben picar muy bien las raíces de celidonia, después cocerlas en vino, y hacer respirar al paciente el vapor del vino. Después hacer un gargarismo con el vino donde se ha cocido esta planta, porque de este modo se seca la campanilla y se purga la cabeza. Contra la pasión cólica se debe picar la planta y después cocerla en vino. Se aplica sobre la parte dolorida en una esponja empapada de este vino y de polvo de la raíz. Para provocar el flujo menstrual retenido y para limpiar la matriz se debe hacer con frecuencia una fomentación o calentamiento de las partes de abajo con el agua donde se haya cocido esta planta. Para los chancros de la boca o de otras partes externas, o para la corrosión de una llaga que crece todos los días, se deben mezclar bien polvo de la raíz de celidonia con polvo de rosas en vino agrio. Después se deben cocer hasta que espesen medianamente, y adquieran la consistencia de la mostaza. De esta preparación se untan los lugares donde está el chancro o la corrosión. Es un remedio muy útil. Contra la fístula, se debe preparar el polvo de celidonia con capitellum. El capitellum es una lejía muy fuerte hecha de varias clases de cenizas por los curtidores, es tan fría que hay que añadirle un huevo crudo y cocerla un poco. De este modo, se mezcla el polvo de celidonia con este capitellum, y se aplica con la ayuda de un tubo en el agujero de la fístula. Contra la oscuridad en los ojos, o la oftalmia, o también la roña, hacer un colirio de jugo de celidonia con miel, vino y pimienta blanca. Es un remedio que ha sido probado por muchos. Hay otros que ponen sobre los ojos lo que sale de la raíz cuando se rompe, que es un remedio muy útil. Para estas mismas enfermedades sirve el jugo de las hojas y de las flores de celidonia con miel fina mezclados, y luego se ponen en una vasija de bronce dentro de las cenizas calientes y se cuecen hasta la perfección, luego se guardan y se puede utilizar cuando haga falta. Este singular remedio sana la oscuridad de los ojos.
Strigium es la hierba mora, se le llama también solatrum. Es fría y seca en segundo grado, y en cierto modo es desopilante de los conductos de la orina del cuerpo, por lo que es diurética. Mientras está verde tiene una gran virtud, tanto en sus hojas como en su fruto, pero cuando se seca no tiene ninguna virtud. Contra la opilación del hígado y del bazo y, especialmente, contra la ictericia que se produce porque en los conductos del hígado con bilis están opilados, se debe dar a beber su jugo, o bien hacer con este jugo y azúcar un sirope. Aún mejor es dar dos onzas de su jugo con cinco dracmas de ruibarbo. Contra los apostemas que hay en el estómago, en el hígado o en los intestinos se debe dar jugo de hierba mora con una tisana. Dioscórides alaba mucho este remedio. Contra el calentamiento del hígado se debe doblar muchas veces un trapo, empaparlo de este jugo y aplicarlo sobre el hígado. Este mismo trapo, así doblado y mojado en este jugo se puede poner encima de la podagra. Todavía es mejor si al jugo se le añade aceite rosado, vino agrio o agraz, se moja con esto el trapo y se aplica encima. Contra los apostemas calientes cuando son recientes para consumir la materia se debe poner encima la planta de la hierba mora picada.


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